Según datos de la Secretaría de Educación Pública (SEP), en México hay 760,000 niños superdotados, es un cifra impresionante si duda alguna, pero que se hace con todo ese talento, la carencia de programas académicos, ha provocado desaprovechar todo ese potencial.
Se imaginan a esos niños bien conducidos por académicos expertos, desarrollo sería el resultado, bienestar y muchas cosas traería el prestar atención a ese número de niños en especial y no es ser discriminación, si no por lo contrario desarrollando y potencializando esa propensión al conocimiento, todos nos veríamos beneficiados. O es que a alguien le hizo daño, las ideas del alemán Albert Eisten, claro que no (a excepción de sus competidores coetáneos, quede más bien losbeneficio), entonces no conviene potencialidad los talentos.
Viene a colación, la historia más reciente que tiene como protagonista a un niño Mexicano que quiere estar en el más alto nivel en Harvar, intittución que por cierto tiene ya programas para adolescentes superdotados.
El oriundo de Michoacán, que reservo su nombre por cuestiones de privacidad, fue detectado como niño genio cuando cursaba el cuarto año de primaria, y que luego de dejar la escuela por sufrir bulling, ha terminado en solo siete meses primaria y secundaria. Sólo para darse una idea el menor fue diagnosticado con un coeficiente intelectual IQ de 152-160, similar al inventor alemán mencionado líneas atrás. Ya desde 130 en IQ se consideran superdotados.
Ojalá de creen programas para la atención de estos niños y no siga la fuga de cerebros por el bien de todos.
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